Son tantos los pensamientos que envuelven en este instante mi mente que no tengo nada claro, lo único claro que tengo es el. Él es mi razón por la que cada día me acueste con una sonrisa en la cara y me levante todavía con ella, de que me acueste con ganas de que al despertarme él este junto a mi abrazado, de que mi vida ahora sea todo alegria y la tristeza se quede apartada a un lado, de que me pase las horas deseando volver a verlo, de que recuerde una a una las palabras que me dice.
Y aquí estoy, tumbada en medio del campo sola, bueno no tan sola, el siempre está conmigo en mi corazón...
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